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Cómo se comunica un Expediente de Regulación de Empleo

REDACCIÓN Viernes 11 de octubre de 2019

Es una de las situaciones más complicadas a las que se puede enfrentar un profesional de la comunicación.

IMAGEN PERJUDICADA

Un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) o cualquier proceso de reestructuración o cierre mal gestionado en una empresa tiene consecuencias negativas inmediatas en el funcionamiento de su plantilla: rumores e inseguridad entre los trabajadores, desmotivación y pérdida de implicación, mal ambiente, etc. Y este descontento interno enseguida puede reflejarse en la imagen externa de la compañía.


ERROR DE OPACIDAD

El error más grave es decidirse por no informar claramente a los trabajadores de lo que está ocurriendo, pues tarde o temprano llenarán ese vacío de datos con su propia versión de los hechos, rara vez favorable a los intereses corporativos, y su idea de los acontecimientos se convertirá en la realidad ante los medios de comunicación y la sociedad en general.

 

TOMAR LA INICIATIVA

Trabajadores, comité de empresa, Administración, sindicatos, proveedores, clientes, bancos, accionistas, instituciones, ciudadanos, prensa, redes sociales…. son muchos los frentes que deben atenderse y cada uno tiene sus distintas motivaciones. Además, en muchos casos, vienen acompañados de manifestaciones, protestas públicas y huelgas. La rapidez en la capacidad de respuesta ante los acontecimientos es vital, ya que en estos temas hay muchas audiencias involucradas, y la empresa debe llevar la iniciativa en todo momento y ser una fuente activa de información.

 

CLARIDAD CONTRA LAS FILTRACIONES

La incertidumbre es el caldo de cultivo perfecto para el deterioro de la vida profesional y empresarial. Para evitarlo, es imprescindible tender una vía de información directa entre la dirección de la entidad y los empleados, evitando las filtraciones de terceros y las distorsiones de los mensajes.

 

 

EL BOCA A BOCA

Sin embargo, hasta el momento, la mayoría de los equipos directivos no suelen comunicar de primera mano a su plantilla la apertura de un expediente de despido colectivo, y son los corrillos y el boca a boca la principal fuente de información. El canal informal es el menos apropiado para enterarse de este tipo de noticia, pero es más habitual que llegue a través de un sindicato o de un compañero en el pasillo que desde la propia dirección.

 

COORDINACIÓN

La empresa afectada tiene que comunicar a la plantilla el alcance de la crisis laboral, el número y nombre de los empleados afectados, si va a haber o no bajas incentivadas, etc. La estrategia de comunicación interna y de relaciones públicas debe fluir paralela y perfectamente coordinada con el trabajo desempeñado por los equipos jurídicos y de recursos humanos. De esta manera, se logrará minimizar impactos y será menos traumática para todas las partes implicadas, favoreciendo la normalidad y un adecuado clima laboral que permita superar el proceso.