ARTÍCULO DE JOSEP HILARI (INGRAM MICRO) /Aunque resulte paradójico, hablar de tecnología en la sociedad digitalizada del siglo XXI no es sencillo. Comunicar tecnología en un mundo digital requiere claridad, creatividad y confianza. En una era de constante evolución, aquellos que logren transmitir el mensaje de manera accesible, atractiva y auténtica marcarán la diferencia. La clave no es solo hablar de tecnología, sino hacer que la audiencia realmente la entienda y se involucre en su transformación.
Por Josep Hilari, director de Marketing de Ingram Micro / 4 de marzo de 2025
El formato en el que se presenta la información es tan importante como el contenido en sí. Los videos explicativos, infografías y podcasts han demostrado ser herramientas eficaces para captar la atención del público. En un mundo donde el tiempo es un recurso limitado, los mensajes breves y visualmente atractivos generan mayor impacto.
Las redes sociales y los canales digitales han cambiado las reglas del juego. No basta con publicar contenido, sino que es crucial conocer las particularidades de cada plataforma. Mientras que LinkedIn es ideal para artículos especializados, TikTok y Instagram pueden ser más efectivos para videos cortos y explicaciones rápidas. Adaptarse al lenguaje y dinámica de cada red maximiza el alcance y la efectividad del mensaje.
Traducir lo imposible
Uno de los errores más comunes al hablar de tecnología es la excesiva tecnicidad. Si bien los expertos comprenden términos complejos, el público en general necesita explicaciones claras y accesibles. Utilizar metáforas, ejemplos de la vida cotidiana y un lenguaje cercano facilita la comprensión y genera mayor interés en la audiencia.
La tecnología es un asunto complejo. Hablamos de grandes mejoras que encierran, a su vez, enormes avances prácticamente invisibles. Dentro de cada dispositivo hay tecnología con la que ni siquiera podíamos soñar hace algunas décadas. Hay conceptos enrevesados, relaciones complejas y realidades cambiantes a las que no es fácil seguir la pista. Por eso, la labor de los profesionales de la Comunicación enfocados en este sector debe ser, en primer lugar, traducir esos avances a un lenguaje comprensible por usuarios que finalmente acaben comprando ese móvil de última generación, y a su vez crear contenido atractivo y educativo eligiendo los formatos adecuados para cada audiencia y plataforma.
Esa labor pedagógica forma parte del ADN de compañías como Ingram Micro, donde nos esforzamos por explicar a las empresas el trasfondo del tsunami digital: de dónde viene, hacia dónde creemos que va y, sobre todo, cómo deben surfearlo (y aprovecharlo). Porque con la tecnología no debemos ceñirnos a sortear los cambios según vienen para no quedarnos fuera, sino que debemos hacerlos nuestros y adaptarlos a nuestros objetivos. Pero no siempre es fácil tener esta visión holística de fenómenos que, aunque convergen, se desarrollan por separado. Solo expertos realmente inmersos en la materia pueden unir los puntos para lograr la fotografía completa.
Comunicar es acompañar
La comunicación es también un fenómeno complejo que encierra muchas visiones, herramientas, estrategias y objetivos. La comunicación tecnológica ya no es unidireccional. Las marcas y profesionales deben fomentar la conversación, responder preguntas y generar espacios de interacción. Crear una comunidad en torno a un tema tecnológico no solo refuerza el mensaje, sino que también ayuda a entender mejor las necesidades e inquietudes del público. Con el auge de la desinformación, la credibilidad es un activo fundamental. Las empresas y comunicadores debemos apoyarnos en datos verificables, fuentes confiables y una comunicación transparente. Evitar el sensacionalismo y el exceso de promesas ayuda a construir una relación sólida con la audiencia.
Desde Ingram Micro hemos optado por la sencillez de comunicar la realidad sin artificios, pero con el convencimiento de que nuestra posición en el mercado nos otorga la autoridad necesaria para explicar los cambios con consistencia. Y es que no hay mayor acierto que dejar a un lado lo llamativo para centrarse en lo necesario. Quizás tenga menos impacto a corto plazo, pero a medio y largo plazo, que es donde se juega la verdadera partida de la tecnología, nos posiciona como el auténtico partner de confianza para todo el canal. Por eso, el gran error es quedarse en la superficie, porque ya hemos visto que la verdadera transformación digital no va solo de tecnología, sino de una nueva mentalidad orientada a la innovación y la agilidad.
En Ingram Micro somos conscientes de nuestra responsabilidad en el desarrollo e impulso del sector IT, y por eso utilizamos nuestra posición también como herramienta para comunicar con rigurosidad y profesionalidad cada avance tecnológico o previsión de mercado. Porque si algo hemos aprendido en nuestra ya larga trayectoria como líderes en el Canal es que la complejidad de la tecnología no se resuelve con llamativas prestaciones y novedades que impresionan, sino con un minucioso análisis de necesidades, objetivos y realidades que se traduzca en soluciones basadas en productos y servicios que aportarán eficiencia, resiliencia y mayor competitividad gracias a la tecnología. Y, en este punto, las palabras son tan importantes como los dispositivos. Y viceversa.