La pandemia del Covid-19 ha cambiado nuestra manera de trabajar y de relacionarnos. En España después de más de un mes de confinamiento, nuevos hábitos impregnan la dinámica diaria del trabajo. Aparte de adaptarnos a la nueva situación a diferentes niveles, ya sea adaptando los servicios para nuestros actuales clientes y potenciando una oferta adecuada a las necesidades del mercado, o ajustando las dinámicas del trabajo en equipo, un nuevo activo está presente en nuestro nuevo escenario 24/7: la empatía.
Por Marina Caño Galindo , Directora de la oficina de Barcelona de LF Channel / 7 de mayo de 2020
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Este acto intelectual, que parecía estar en una segunda línea en el ámbito laboral, es el activo más preciado en abril de 2020 y la apuesta número uno para el equipo de LF Channel. La regla de oro para nosotras es siempre entender, para después actuar. Ofrecer un buen servicio y unos buenos resultados proviene del entendimiento sobre lo que necesita el cliente. El buen rendimiento del equipo se produce siendo consciente de las aptitudes que ofrece cada persona y potenciándolas en línea con sus motivaciones. Y contar con una relación fluida con las y los periodistas surge de la confianza y se construye entendiendo sus necesidades, sus áreas de interés, tiempos y situación laboral. Sin la capacidad de empatía no existe el entendimiento, y sin esto, tampoco nuestro principal servicio: la comunicación efectiva.
Nuestra apuesta por la empatía forma parte de la filosofía de empresa, es una forma de construir relaciones de largo recorrido desde el primer día. Sería deseable que fuera algo que permee el saber hacer de las agencias de comunicación, y no un recurso circunstancial para sobrevivir en una situación excepcional como la actual, o en momentos puntuales.
¿Cómo practicarla?
- Empatía con el equipo. Habla con cada miembro del equipo de manera periódica y sistemática y, sobre todo, escucha. Preguntar un “¿cómo te encuentras?”, “Si necesitas respirar cinco minutos, permítetelo”, deberían ser dos frases ordinarias en nuestro día a día. El principal motor de una agencia son sus integrantes. Si cuidamos, tratándolos como seres humanos, y no solo como recursos de sabiduría y producción, su rendimiento y compromiso será más sólido y auténtico.
- Empatía con los periodistas. Se avecinan tiempos complicados para el sector periodístico, se anuncia una nueva crisis y en las redacciones más importantes del nuestro país se están implementando los ERTE. Apoyemos su situación, aparte de cultivar las relaciones ya establecidas, hablemos con estos/as profesionales, entendamos sus circunstancias y adaptemos los sistemas y herramientas para trabajar de la mano. Asimismo, un entendimiento mutuo nos ayudará a tomar mejores decisiones estratégicas con nuestros clientes.
- Empatía con los clientes. Ayudemos a nuestros clientes a entender el entorno y las oportunidades juntos. Así podremos ofrecerles soluciones adecuadas para su sector y actividad empresarial. Los profesionales de las agencias de comunicación debemos ser la ventana hacía la opinión pública para nuestros clientes, utilicemos esta herramienta como palanca para hacerles más fuertes.
¿Será el 2020 el año de la empatía? Creemos que sí. La apuesta debe ser fuerte, una inversión a corto plazo no bastará, si queremos garantizar relaciones sólidas con nuestro entorno empresarial y laboral, deberá permanecer como valor principal de cualquier organización y como aptitud imprescindible para los comunicadores a partir de ahora.
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