martes, marzo 25, 2025

La simbiosis del marketing y las relaciones públicas: una oportunidad para las agencias de comunicación

ARTÍCULO DE MARIO JIMÉNEZ (THEGARAGE) / Aunque despacio y no sin grandes dosis de desconfianza, parece que las fronteras entre las relaciones públicas y el marketing son ya flexibles y difusas. Si bien ambas disciplinas pueden tener objetivos comunes, como construir una imagen positiva de la marca, aumentar el conocimiento y generar engagement con el público, generalmente su recorrido ha discurrido por vías paralelas. Del mismo modo que por caminos paralelos circulaban las agencias de marketing y las de PR.

Por Mario Jiménez, CEO de theGarage / 25 de febrero de 2025

Esto, sin embargo, está empezando a cambiar. Puede que el motivo esté en la búsqueda de una optimización de costes por parte de las empresas, que unifican cada vez más en un solo departamento, normalmente el de marketing, las dos áreas. O puede que esté en la incertidumbre que provocan los profundos cambios de comportamiento de los consumidores, tanto a la hora de informarse como de ser fieles a una marca. El caso es que las agencias nos hemos visto en la necesidad de adaptarnos a este nuevo escenario. Y, para variar, nadie nos ha pedido opinión.

Lejos de ser un problema, creo que supone una enorme oportunidad. Y aunque no somos un sector al que le hagan falta demasiadas excusas para evolucionar y crecer, tenemos que reconocer que sí hemos sido un gremio tradicionalmente pureta con respecto a nuestro trabajo, y que la simbiosis entre el marketing y las relaciones públicas no nos ha venido mal para ponernos un poco las pilas.

Nuestra forma de plantear la estrategia de los proyectos se ha vuelto más líquida, trascendiendo el foco tradicional en los medios de comunicación, a los que, sin perder de vista, por supuesto, consideramos ahora una parte más de un todo mucho más amplio, que también incluye las redes sociales, el marketing de influencia, los eventos o acciones que no tienen por qué tener necesariamente reflejo en prensa. Y los fines, no nos engañemos, siguen siendo los mismos: hacer más relevante a una marca, ayudarla a consolidar su reputación y, por supuesto, impactar en las ventas.

Al mismo tiempo, hemos incorporado servicios y perfiles que indiscutiblemente nos han hecho mejores: herramientas de análisis de datos, equipos creativos, especialistas en social media, producción de eventos… Por supuesto, no todas las agencias lo habrán hecho en la misma medida o al mismo tiempo, pero si reflexiono sobre el tipo de agencia que era theGarage hace 10 años y la que somos ahora, sólo puedo pensar que el cambio es inevitable, y que llega de una forma mucho más orgánica de lo que creemos.

También tengo bastante claro que las agencias de comunicación somos las mejor preparadas para adaptarse a este reto. Al final se trata de leer la cultura social, de anticipar e interpretar tendencias, de generar seguridad en un entorno de incertidumbre. Y cuando toca convertir todo eso en una estrategia que desemboque en una narrativa coherente, que mejore la percepción y la seguridad de una marca, no cabe esperarlo de una agencia creativa o de publicidad.

Convirtamos el “problema” en una oportunidad. Una oportunidad de reivindicarnos, de ser empresas más atractivas para trabajar, de ser percibidos por fin como el partner más estratégico para cualquier compañía. Se trata de ampliar horizontes y de ser mejores, ¿no? Pues manos a la obra. El cambio social ya se ha producido, y no van a ser las audiencias las que se adapten a nosotros.