martes, abril 16, 2024

Lucía Casanueva y Valvanuz Serna, socias de PROA: «Es un buen momento para renovarse»

La agencia PROA, tras más de 10 años en el mercado, ha puesto en marcha un reposicionamiento estratégico y un rebranding de su imagen corporativa. Hablamos con Lucía Casanueva y Valvanuz Serna Ruiz, socias directoras, que nos explican el cambio.

Por Redacción, 16 de junio de 2020

Proa acaba de iniciar un reposicionamiento estratégico en el sector de la comunicación, acompañado de un rebranding de su imagen corporativa. Hablemos de lo primero. ¿En qué consiste el reposicionamiento estratégico?

Después de una trayectoria de más de 10 años en el mercado español, hemos considerado que tocaba evolucionar, por eso decidimos cambiar nuestro posicionamiento estratégico y nuestra identidad visual, con un nuevo logotipo y una nueva web. Pero también apostamos por una propuesta de valor basada en reivindicar la sensatez, la reflexión y la excelencia en todos los niveles de la operación, que, en definitiva, se resume muy bien en nuestro lema, ‘Un modelo eficaz de consultoría de comunicación”.

Este reposicionamiento estratégico eleva a la compañía hacia la calidad y el liderazgo e introduce una mentalidad renovada que busca ofrecer al cliente un servicio personalizado de excelencia. Si segmentamos el mercado de la comunicación actual entre el prestigio, la renovación y la creatividad, PROA ocupa un espacio relevante en la renovación del sector a través de una innovación real, sostenible y optimista, alejada del ruido, de los fuegos artificiales efímeros y cercana a la realidad del cliente.

¿Es este un buen momento para un cambio de estas características?

Estamos convencidas de que sí. Cuando comenzó esta crisis, nos preguntamos si estábamos en las mejores condiciones para ofrecer soluciones a nuestros clientes, y nos dimos cuenta de que nuestra propuesta de valor nos hacía estar especialmente preparados para ello.

En el contexto actual, marcado por la crisis global que ha provocado la COVID-19, nuestros clientes necesitan más que nunca una consultoría de comunicación honesta, transparente y comprometida con sus resultados y la situación por la que están atravesando. Creemos que hay espacio para ofrecer sensatez frente al gasto excesivo; reflexión frente a la inmediatez y el ruido; honestidad y excelencia en todos los niveles de operación, y también estamos convencidas de que es posible hacerlo con una estructura lo suficientemente flexible para no generar gastos superfluos.

¿En qué va a cambiar el mercado de la comunicación en la era post-covid?

La comunicación es la clave para salir reforzados de esta crisis y en PROA contamos con el talento, la metodología, la estructura y los recursos necesarios para ayudar a nuestros clientes, con un servicio de calidad, justo y discreto, a enfrentarse a los desafíos que se les presenten y a tomar decisiones que impacten positivamente en su reputación, en su negocio y en la sociedad.

¿Cómo definirías el estado de ánimo de vuestros clientes de cara a reanudar sus actividades de comunicación y marketing?

Los clientes de PROA siempre han creído en la comunicación, porque la consideran un elemento esencial para la gestión de su reputación. Vemos que nuestros clientes no han parado su actividad de comunicación; ahora reactivan acciones que por la coyuntura tuvieron que dejar en stand-by y están adaptando las estrategias y planes de comunicación a un entorno completamente nuevo para el que no existía una hoja de ruta clara con un estado de ánimo positivo y realista.

Respecto al rebranding de la imagen corporativa, ¿cuáles son los principales cambios?

La nueva expresión de PROA se inspira en el territorio simbólico del mar para expresar elegancia y fuerza, algo que también la entronca con nuestras raíces santanderinas. Es una identidad nueva cuidada en detalle y que trasciende suavemente, sin gritar, sin exagerar. Todo queda representado gráficamente en un universo visual elegante y sencillo que culmina en un logotipo tipográfico rotundo que mezcla tradición y modernidad. Cromáticamente, nuestro antiguo color azul se convierte en un azul verdoso característico del fondo marino, de las aguas profundas del mar del norte, al que acompañan el beige con matices dorados y tonos grises en una gama que busca contraste y discreción. La tipografía corporativa es la clave de la nueva identidad. Está inspirada en las letras a mano del diseñador de libros y calígrafo del siglo XX Oscar Ogg, y captura la combinación única de forma caligráfica y tipográfica que logró mediante el uso de plumillas, pinceles y blanqueadores tallados a mano, lo que le da un aspecto artesano y personal que se aleja de la industrialización. El contexto editorial es sobrio, predominando el blanco como un lienzo visible donde la retícula adquiere un rol crítico en la organización de los elementos gráficos y verbales.

¿Por qué habéis eliminado la palabra ‘Comunicación’ de vuestro nombre?

Hemos considerado que, tras diez años de trayectoria, la marca ya es suficientemente conocida en el mercado y así podemos manejar el concepto ‘Comunicación’ de forma indirecta y desvinculado del logotipo en función del contexto.

¿Queréis comenta algún otro tema de interés?

En PROA trabajamos con determinación para crear valor para nuestros clientes y aplicamos nuestro método BitácoraSM, que es un sistema de análisis e inteligencia de mercado para conocer a fondo el sector y el entorno competitivo del cliente y así poder ofrecerle una solución estratégica a la medida de sus necesidades. Hemos sido pioneros en trabajar con una estructura flexible, lo que nos permite contar con los mejores profesionales, con el seniority requerido en cada fase del proyecto, optimizar recursos y trabajar en colaboración con el propio cliente y su equipo. Además, cada miembro del equipo PROA tiene como objetivo contribuir al crecimiento de sus clientes y que esa excelencia de la que estamos hablando se perciba en todas y cada una de las fases del proyecto, desde la recogida del briefing hasta la medición y entrega de resultados.