lunes, abril 29, 2024

Cómo seleccionar y contratar a un Director de Comunicación

ROSA MATÍAS, DIRECTORA DE PROYECTOS DE WELLCOMM Martes 27 de mayo de 2014

Iniciamos aquí el Especial wellcomm dedicado a los profesionales de Recursos Humanos en el sector de la comunicación. En este espacio, iremos analizando todos los aspectos relacionados con la gestión y selección de talento, claves para la mejora del clima laboral y multitud de consejos y prácticas empresariales.

SECCIÓN PATROCINADA POR WELLCOMM

En este primer artículo, Rosa Matías (directora de proyectos de wellcomm) nos da las 10 claves que deben tenerse en cuenta a la hora de contratar a un director de comunicación.

 

1. DEFINICIÓN DEL PERFIL. 

Es fundamental detallar pormenorizadamente las características del perfil que se desea cubrir. Es de gran relevancia tener en cuenta que, en la mayoría de las ocasiones, las responsabilidades de un Dircom están muy enfocadas a la estrategia de la empresa.


2. POSICIÓN EN EL ORGANIGRAMA.

También hay que definir el lugar que va a ocupar el director de comunicación dentro del organigrama de la empresa, si deberá formar parte del Comité de Dirección, si va a tener responsabilidades en las áreas de comunicación interna, externa, de producto, corporativa, RSC, etc…


3. ¿DE VERDAD NECESITAS UN DIRCOM?

Hay empresas que no tienen claras sus verdaderas necesidades y se lanzan a la búsqueda de un Dircom cuando lo que realmente necesitan es otra figura profesional: un jefe de prensa, un responsable de Relaciones Institucionales, etc… En estos casos, el perfil, las habilidades y las competencias del profesional buscado serán diferentes.


4. RESPONSABLE DE PRODUCTO.

Si la empresa necesita un responsable de comunicación de producto, puede que lo más recomendable sea encuadrar a este profesional en el Departamento de Marketing. Su trabajo debe ser coherente con la estrategia global del área.


5. HABILIDADES PARA LIDERAR.

La empresa tiene que valorar si busca un directivo con habilidades en comunicación o un comunicador que tenga habilidades directivas. En caso de duda, hay que pensar qué es lo que se le exige a un director de Contabilidad, Financiero o Jurídico. En primer lugar se requerirá formación especializada y aptitudes. Las habilidades directivas quedarán en segundo plano ya que se pueden trabajar.


6. UN PERIODISTA NO SIEMPRE ES LA MEJOR OPCIÓN.

Es habitual que las empresas seleccionen a un periodista en activo, a la hora de contratar un Director de Comunicación. Lo cierto es que los periodistas, aunque posean una gran trayectoria en medios, no siempre encajan en la cultura de las organizaciones que los contratan ni están capacitados para desempeñar labores directivas.


7. ENTENDER LA DINÁMICA EMPRESARIAL. 

En los casos en que se opte por contratar un periodista, es recomendable que éste tenga una fuerte formación en comunicación corporativa. Sólo de esta manera comprenderá mejor la dinámica empresarial, la orientación al cliente y el componente estratégico de la comunicación en las organizaciones.


8. DOMINIO DE LAS HERRAMIENTAS DE COMUNICACIÓN.

Un requisito fundamental del profesional seleccionado es el conocimiento de todas las herramientas y técnicas de la comunicación corporativa: comunicación interna, relaciones con la prensa, relaciones institucionales, gestión de crisis, marca, patrocinios, acción social, comunicación online, etc…

 

9. EXPERIENCIA CRÍTICA REQUERIDA

Tal y como sugiere el Manual de Comunicación elaborado por Dircom los elementos clave a tener en cuenta son:

– Diseño e implementación de estrategias de comunicación

– Liderazgo de proyectos de cambio organizacional

– Funciones de portavocía/representación

 

– Gestión de equipos multidisciplinares

– Gestión de situaciones de crisis y resolución de conflictos


10. NI AMIGOS NI HEADHUNTERS NO-ESPECIALIZADOS

Un error habitual en las búsquedas es fiarse de las recomendaciones de amigos o de headhunters que no entienden la idiosincrasia de un sector tan complejo como éste. Son vías que casi nunca suelen funcionar y que terminan en sonoros fracasos. Lo más sensato es dejar la selección en manos de headhunters especializados en el sector de la comunicación.